Buenos Aires. Los docentes de Santa Cruz que se encuentran en Buenos Aires y el jueves fueron reprimidos por la Policía acusaron ayer a la presidenta Cristina Fernández de tener la “responsabilidad principal” en lo ocurrido y aseguraron que el hecho “agrava” el conflicto en la provincia, por el cual ya se perdieron más de 50 días de clases.
Los maestros santacruceños cumplieron ayer 56 días de paro, en reclamo de un aumento salarial del 50 por ciento y piden una mesa de negociación, ya que el gobierno de Daniel Peralta impuso por decreto un 25 por ciento de aumento.
Los dirigentes de Adosac Daniel Escobar y Armando Apaza, al referirse al desalojo violento de los maestros que habían instalado el jueves una carpa frente al Ministerio de Trabajo de la Nación, dijeron que “la responsabilidad principal tiene que ver con la Presidenta” y también con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Lo ocurrido “sin duda” agrava el largo conflicto de los educadores y es la “ratificación de esquemas represivos”, sostuvo Apaza, titular de Adosac de Río Turbio.
El dirigente señaló que el Gobierno tiende a “tercerizar la represión con las patotas sindicales”, como ocurrió en abril pasado en la localidad santacruceña de 28 de Noviembre, cuando un grupo de manifestantes de la Uocra golpeó a maestros que realizaban una protesta durante una inauguración de obras públicas cuando Peralta estaba en el lugar. Ambos dirigentes dieron por seguro que hoy, en un congreso que realizará el gremio en Santa Cruz, será ratificada la huelga.
Mientras, Adiuc volvió a marchar ayer en Buenos Aires y entregaron un petitorio en Casa de Gobierno. Un vocero de los docentes manifestó que en la nota presentaron una “apelación” a la presidenta Cristina Fernández para que interceda ante el gobernador Peralta.
En esa marcha rumbo a Plaza de Mayo, un grupo de manifestantes se desprendió de la columna principal y comenzó a arrojar piedras contra la Policía, provocando heridas a ocho efectivos. Tras los incidentes, 45 personas fueron detenidas.
No obstante, el repudio a la represión llegó desde todos los puntos del país, organizaciones, sindicatos y partidos políticos.
La Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba, gremio dirigido por la diputada nacional kirchnerista Carmen Nebreda, se solidarizó con los docentes santacruceños. “Nos solidarizamos con nuestros pares de Santa Cruz, reclamamos cesar todo acto intimidatorio”, decía el comunicado por el cual adhieren a la Jornada Nacional de Repudio dispuesta por Ctera para el próximo lunes.
Desde Santa Cruz, los docentes repudiaron el violento desalojo. En Río Gallegos, diferentes gremios se congregaron frente a la gobernación y marcharon por las calles céntricas hasta la sede de la Secretaría de Trabajo. En Caleta Olivia, unas dos mil personas se movilizaron desde el monumento al obrero petrolero hasta el municipio local, mientras en Río Turbio marcharon docentes y estatales junto a estudiantes de distintos niveles.
En Rosario, los docentes nucleados en la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafe), la CTA y ATE dispusieron ayer de un paro que comenzó a las 12 y afectó los turnos tarde, vespertino y noche.
Los maestros santacruceños cumplieron ayer 56 días de paro, en reclamo de un aumento salarial del 50 por ciento y piden una mesa de negociación, ya que el gobierno de Daniel Peralta impuso por decreto un 25 por ciento de aumento.
Los dirigentes de Adosac Daniel Escobar y Armando Apaza, al referirse al desalojo violento de los maestros que habían instalado el jueves una carpa frente al Ministerio de Trabajo de la Nación, dijeron que “la responsabilidad principal tiene que ver con la Presidenta” y también con el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. Lo ocurrido “sin duda” agrava el largo conflicto de los educadores y es la “ratificación de esquemas represivos”, sostuvo Apaza, titular de Adosac de Río Turbio.
El dirigente señaló que el Gobierno tiende a “tercerizar la represión con las patotas sindicales”, como ocurrió en abril pasado en la localidad santacruceña de 28 de Noviembre, cuando un grupo de manifestantes de la Uocra golpeó a maestros que realizaban una protesta durante una inauguración de obras públicas cuando Peralta estaba en el lugar. Ambos dirigentes dieron por seguro que hoy, en un congreso que realizará el gremio en Santa Cruz, será ratificada la huelga.
Mientras, Adiuc volvió a marchar ayer en Buenos Aires y entregaron un petitorio en Casa de Gobierno. Un vocero de los docentes manifestó que en la nota presentaron una “apelación” a la presidenta Cristina Fernández para que interceda ante el gobernador Peralta.
En esa marcha rumbo a Plaza de Mayo, un grupo de manifestantes se desprendió de la columna principal y comenzó a arrojar piedras contra la Policía, provocando heridas a ocho efectivos. Tras los incidentes, 45 personas fueron detenidas.
No obstante, el repudio a la represión llegó desde todos los puntos del país, organizaciones, sindicatos y partidos políticos.
La Unión de Educadores de la Provincia de Córdoba, gremio dirigido por la diputada nacional kirchnerista Carmen Nebreda, se solidarizó con los docentes santacruceños. “Nos solidarizamos con nuestros pares de Santa Cruz, reclamamos cesar todo acto intimidatorio”, decía el comunicado por el cual adhieren a la Jornada Nacional de Repudio dispuesta por Ctera para el próximo lunes.
Desde Santa Cruz, los docentes repudiaron el violento desalojo. En Río Gallegos, diferentes gremios se congregaron frente a la gobernación y marcharon por las calles céntricas hasta la sede de la Secretaría de Trabajo. En Caleta Olivia, unas dos mil personas se movilizaron desde el monumento al obrero petrolero hasta el municipio local, mientras en Río Turbio marcharon docentes y estatales junto a estudiantes de distintos niveles.
En Rosario, los docentes nucleados en la Asociación del Magisterio de Santa Fe (Amsafe), la CTA y ATE dispusieron ayer de un paro que comenzó a las 12 y afectó los turnos tarde, vespertino y noche.
No hay comentarios:
Publicar un comentario