Denunció a una inmobiliaria de haberlo discriminado por ser gay

"¡Te dije que el dueño del departamento no acepta tu condición!". Damián M., de 33 años y estudiante de psicología, sostiene que eso le dijo la dueña de la inmobiliaria ubicada en 9 de Julio al 1400. El hombre, interesado en alquilar un departamento de un dormitorio, asegura que presentó toda la documentación requerida (un recibo de sueldo y dos garantías propietarias) pero recibió a cambio varias excusas y una indagación desmedida de su vida personal y trato hostil. El hombre denunció el hecho en el Area de la Diversidad Sexual del municipio, donde explicaron los pasos a seguir en estos casos (ver aparte).




Damián recordó ayer que todo comenzó el viernes 26 de agosto. Luego de ver el departamento que le interesaba en un 8º piso de Mendoza y Pueyrredón, se fue del lugar con un papel en el que una empleada de la inmobiliaria le había anotado todo lo que debía presentar para alquilarlo.



"A la hora estaba en el lugar con todo, pero me hacen una observación de una de las garantías. Vuelvo a ir con todo en orden y me apunta otro problema con el recibo de sueldo. Y me indaga una y otra vez, me plantea más cosas y pensé que quería datos de mis ingresos, pero no. Porque aunque le presentaba todo lo que me pedía, me volvía a preguntar mis datos como si nunca me hubiese atendido hasta que empezó a decirme a través de su secretaria que no me alquilarían el departamento, sin darme razones", relató Damián.



En ese sentido, agregó: "Cuando pedí personalmente los motivos, la dueña se encolerizó. Me dijo lo de mi «condición» y le respondí que me estaba discriminando. Me abrió la puerta para que me fuera y me dijo: «Pensá lo que quieras». Me fui llorando".



Visibilizar. La coordinadora del Area de la Diversidad Sexual, Noelia Casati, pidió que los que sean discriminados como Damián visibilicen rápidamente el maltrato y lo denuncien, tal como hizo él, y no dejen que la situación se repita. Luego explicó que, de acuerdo al caso y muchas veces también a la voluntad de la víctima, estas actitudes pueden judicializarse o multarse por contravenir la ordenanza 6321/96, o bien un juez de faltas puede aplicar una probation. "Como ocurrió con una conocida hamburguería, donde impartieron cursos de diversidad sexual a los empleados. O el caso de una travesti maltratada en un supermercado, que dijo que todo lo que pretendía como resarcimiento era que el personal de vigilancia del comercio le expresara sus disculpas públicas", indicó Casati.



La funcionaria agregó que es común que algunas personas, por desconocimiento o directamente por homofobia, "ni siquiera puedan usar términos ofensivos y, en cambio, den vueltas, ignoren o usen términos como el de «condición» para descalificar".



Después reveló que cada semana hay nuevas denuncias en boliches y comercios de todo tipo. "Pero sorprende cómo ha crecido la discriminación hacia la población de la diversidad sexual en el ámbito laboral y educativo", alertó.



Casati enfatizó que en estos casos de maltrato es importante la presencia de testigos y preguntarle el nombre y el cargo al agente de discriminación.



Por eso recordó que "el artículo 5º de la ordenanza municipal estipula, además, que en espectáculos o lugares abiertos se debe exhibir un cartel que exprese la prohibición a discriminar por etnia, género, orientación sexual, edad, religión, ideología, opinión, nacionalidad, caracteres físicos, condición psicofísica, social o económica".



Denuncias

Ante un caso de discriminación se puede llamar a la GUM (0800-4440909), o bien acudir al Area de la Diversidad Sexual para recibir asesoramiento de un equipo interdisciplinario. La oficina está en Buenos Aires 856 y la atención es de 8 a 14. El teléfono es 480-2444 y el mail: diversidad@rosario.gov.ar.